Glúteos perfectos

La fórmula para conseguir un trasero firme y perfecto es muy sencilla: ejercicio,  una dieta rica en proteínas y cuidar mucho la zona.

Hacer deporte 45 minutos a diario y tres veces a la semana es básico. Los ejercicios para fortalecer la musculatura de esta zona son variados, dinámicos  y sin la necesidad de acudir a un gimnasio, por ejemplo andar, pasear, correr, nadar, bailar, etc.  A la vez es importante combinarlos con otro tipo de rutina que tanto la puedes hacer en el gimnasio como en casa durante 15 minutos: extensiones de piernas combinadas con patadas, sentadillas, splits, plataforma vibratoria, etc; para trabajar los músculos abductores, glúteos, muslos y rodillas.

La dieta también es un factor fundamental para conseguir el culo deseado. Es muy importante ingerir entre 300 g y 500 g al día de proteínas. Hay que comer, aparte de frutas y verduras, carnes magras (pollo, pavo), pescado blanco y azul (merluza, salmón, sardinas), huevos y leche desnatada.

Los tratamientos como la mesoterapia, la cavitación, radiofrecuencia o lipoláser favorecen la circulación sanguínea y linfática, la eliminación de la grasa y la elasticidad de la piel.

Ya no hay excusa para lucir unos glúteos perfectos este invierno.